miércoles, 15 de agosto de 2012

Improvisación, Creatividad y el Mejor Disco de Jazz de la Historia

En los últimos años la Improvisación ha cobrado una inusitada relevancia, tanto así que de un tiempo a esta parte han surgido talleres, cursos, conferencias y reuniones de todo tipo respecto a este tema. Además se han escrito muchos libros que tocan directa o indirectamente el tema de la improvisación (en Amazon hay más de 3.400), y de hecho varios de estos autores han llevado sus planteamientos un paso más allá. La inmensa mayoría de ellos afirman que la improvisación sería vital en la gestión moderna de empresas, no solo en los procesos de creación de nuevos productos o servicios, sino también en la construcción de un "mindset" organizacional más flexible y como un catalizador de aprendizaje en las personas.
Otros autores plantean que la Improvisación es una habilidad blanda que se puede, y SE DEBE, enseñar en los colegios y universidades como parte de los programas académicos.
Podríamos definirla como "Un proceso de pensar y hacer casi simultáneo". Implica que las clásicas fases de Diseño, Planificación y Ejecución de un proyecto, convergen en tiempo real para obtener un resultado nuevo, nunca antes visto... Interesante no?

Rastrear hacia atrás el fenómeno que ha ocasionado la Improvisación no es muy complicado.
El año 1988 los ingleses Dan Patterson y Mark Leveson comienzan un programa londinense de radio en la emisora BBC radio 4 al que llamaron Whose Line is it Anyway? Se trataba de un programa de improvisación que no tardó en pasar al formato TV, donde tuvo mucho éxito y duró 10 temporadas!
Al poco tiempo este formato de programa aterrizó en EEUU donde el comediante Drew Carey (el tipo con lentes en la foto) convenció al canal ABC para emitir un piloto que tuvo un éxito inmediato.
De ahí en adelante la improvisación se masificó. Y pasó algo inesperado... Muchas personas que veían a la improvisación como algo malo y sinónimo de poca planificación, falta de profesionalismo o hasta flojera, comenzaron a darse cuenta de que en realidad es una habilidad muy importante, que no todo el mundo tiene, que puede marcar la diferencia en un sinnúmero de situaciones y que se puede aprender.
En Chile el fenómeno tardó un poco en llegar. El año 2010 apareció el programa de TV Los Improvisadores que utilizó un formato similar al de Whose Line is it Anyway?, y al igual que en EEUU, tuvo un éxito instantáneo por ser una propuesta novedosa, dinámica y muy entretenida, distinta a todo lo visto anteriormente en la TV chilena. También comenzaron  a realizarse talleres de improvisación para empresas, colegios, universidades, etc. 
Al parecer a más de alguien se le ocurrió que esto de la improvisación podría ser algo más que una simple distracción y que en realidad esta habilidad era importante de desarrollar en las personas, equipos  y entornos laborales!
Y la verdad es que es así! 
A través de la Improvisación se pueden obtener resultados realmente interesantes, excelentes muchas veces, sobre todo en contextos donde se requiere de innovación para generar nuevas soluciones a problemas complejos, o en organizaciones que necesitan reaccionar rápidamente en mercados muy competitivos, y turbulentos. Lo que logra la Improvisación en el entorno laboral es introducir a las personas en nuevos loops de aprendizaje basados en conocimientos y rutinas pre-existentes pero que se vuelven a combinar de maneras distintas para alcanzar nuevas configuraciones de los mismos conocimientos.
Pero se debe tomar en cuenta que la improvisación per se no va a lograr nada si el equipo de gente que se involucra en este proceso no es el idóneo. 
Un muy buen ejemplo de cómo funciona y cuáles son los resultados de la improvisación lo podemos observar en el mundo de la música y más precisamente en el Jazz.
Quizás algunos gerentes podrían sacar algunas lecciones de uno de los mejores jazzistas de todos los tiempos...

IMPROVISACIÓN Y EL MEJOR DISCO DE JAZZ DE LA HISTORIA
Miles Davis
Les debo hacer una confesión. Nunca me interesó particularmente el jazz. 
Y no es que no me guste la música, todo lo contrario! Y tampoco es que NO me guste el Jazz sino que el tema pasa simplemente por un desconocimiento total de este increíble estilo musical.
Y hace unas semanas me encontré de sopetón con el Jazz. Y este encuentro se produjo casi simultáneamente por dos vías.
Por una parte estaba leyendo algunos libros y artículos que tocaban temas de Creatividad, Innovación e Improvisación y me di cuenta de que en muchos de ellos mencionaban al Jazz como una muestra notable de cómo se combinan estas tres cualidades para dar vida a un estilo musical muy interesante. Lo cual me dejó súper intrigado porque no sabía nada del tema...
Coincidente con esto recibí la visita de un primo que justo andaba trayendo un disco de Jazz. Se trataba ni más ni menos que, el considerado por muchos el mejor disco de jazz de todos los tiempos: "Kind of Blue" de Miles Davis.
Me puse a averiguar un poco al respecto de este disco y me encontré que la historia alrededor de éste es realmente increíble.
Sesión de grabación del disco Kind of Blue
El 2 de marzo de 1959 Miles Davis, uno de los más célebres trompetistas y compositores estadounidenses de jazz, citó a algunos de sus amigos músicos al estudio de grabación Columbia Records de Nueva York. Entre el selecto grupo de músicos figuraban   Cannonball Adderley (saxo alto), Paul Chambers (contrabajo), Jimmy Cobb (batería), John Coltrane (saxo tenor), Wynton Kelly y Bill Evans (ambos en piano).
Dentro de los requerimientos de Miles Davis estaba que antes de la sesión de grabación evitaran ensayar, de hecho cuando llegaron sus seis invitados al estudio no tenían idea de qué iban a tocar.
Davis solo les pasó algunos bocetos de las principales líneas de escalas y melodías sobre las cuales iban a improvisar, y se remitió a darles unas breves explicaciones de cada pieza.
Luego de  algunos minutos comenzaron a grabar.
La grabación del disco completo tomó sólo 10 horas en dos sesiones de trabajo (2 de marzo y 22 de abril de 1959) pero el resultado fue francamente increíble.
Kind of Blue se convirtió en poco tiempo en cuádruple disco de platino con más de 4 millones de copias vendidas sólo en EEUU.
Se le considera una de las obras maestras del Jazz, uno de los discos más influyentes de la historia y se incluye dentro del selecto grupo de las producciones musicales más importantes de todos los tiempos incluídos en el Registro Nacional de Grabaciones de la Biblioteca del Congreso de EEUU...
Nada mal para haber sido grabado en solo dos sesiones y casi sin planificación y a punta de pura improvisación no???
El mejor disco de la historia del Jazz se gestó con una combinación compleja, exquisita y muy poco común de elementos que no se encuentran en todos lados.       
Por una parte Miles Davis logró reclutar a varios de los mejores músicos de jazz de su época, mal que mal tocar con Davis era un honor!
Estos músicos aunque no tocaban siempre juntos, se conocían entre sí lo suficiente como para saber exactamente qué tipo de recursos y "mañas" musicales tenían los demás. La comunicación era casi telepática y esto les facilitaba mucho la improvisación y permitía que el trabajo final resultara mucho más fluído y natural.
Además en la grabación sin edición se nota que el ambiente de trabajo que pudo crear  Davis era muy agradable. Los tipos lo estaban pasando realmente bien en el proceso de grabación, abundan las tallas, las bromas y las risas durante las 10 horas que estuvieron grabando. 
En resumen Davis logró la receta perfecta:
Un equipo de excepción finamente seleccionado, un ambiente grato de compañerismo y fluída comunicación y un "método sin método", improvisado, desestructurado y flexible que condicionara la creatividad, la expresividad y el "estado de flujo" de los participantes. 
Y el resultado obviamente fue excepcional, lo suficiente como para pasar a la historia como el mejor disco de jazz que se ha grabado.

PALABRAS AL CIERRE
Todo esto da para pensar...
Quizás el mundo académico, el mundo de las empresas y el mundo de la política (donde hay mucho que mejorar) debieran prestar un poco más de atención a cómo se hacen las cosas en "otros mundos". 
Quizás el mundo de la música, la pintura, la danza y el arte en general tiene muchas lecciones que enseñarnos...
Quizás en unos años o décadas más, se enseñe creatividad e improvisación en los todos colegios y universidades como parte de un currículum completo que aborde de manera más holística a los distintos tipos de aprendizaje que se puedan amoldar mejor a los distintos tipos de estudiantes... No todos somos iguales por lo tanto no todos aprendemos igual.
Quizás en el futuro se considere a la improvisación como una habilidad prioritaria para hacer frente al complejo y caótico mundo en el que nos movemos.
Quizás...
Yo creo que es lo más probable...

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